miércoles, octubre 10, 2007

Intermezzo Primo, Corale Dies Iræ

Dies iræ, dies illa,
Día de la ira; día aquel
Solvet sæclum in favilla,
en que los siglos se reduzcan a cenizas;
Teste David cum Sibylla!
como testigos el rey David y la Sibila.
Quantus tremor est futurus,
¡Cuánto terror habrá en el futuro
quando judex est venturus,
cuando el juez haya de venir
cuncta stricte discussurus !
a juzgar todo terriblemente!

Leer entre líneas, es todo. El Día de la Ira no sólo es lo que parece, es también lo poco evidente, puedes pensar en que estoy pasando a llevar la teoría de los pingüinos que conspiran con física nuclear (gracias Cameron) pero no es así. Sin afán de inquisidor medieval. Es simplemente el gusto por la belleza de una época anterior a la que eso surgía como un mero error. Lo hermoso de la ira: el sin sentido, es lo más puro y violento, ¿acaso no iguales son otros sentimientos que los agobian a ustedes, mortales?... sin embargo eso de ser héroe está de más, firme y cínico ante la vida, ¿O le temes a algo? ¿Qué es lo peor que puede pasar? enfréntalo y no seas cobarde, ni hadas ni ejércitos pueden salvarte de ti mismo y si soy cruel, es que está en mi naturaleza, me gusta la sangre y espero estar presente en el Dies iræ entre los cadáveres y el hielo y el fuego en tanto si



Teste David cum Sibylla!




Antigua Misa de Requiem

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